9 de diciembre de 2005

Mi enfermedad

Mi enfermedad
Mirá que me estás pisando
No ves que me estás pisando

Ey
Corazón

Abajo de tu pie no está mi pie
estoy yo.


Disimulá que te importa un carajo lo que digo
me hablás para que te hable cuando estás sola
mis palabras se filtran en tu oído
sólo soy cuando es tuyo el reclamo
que los buenos
no boludos
desoyeron.

Ahora versión cinéfila
almodovar
tarantino
szifrón
siempre te gustó la imagen
el movimiento y el calor
de todo lo que calienta
hora y media entre tus piernas.
Ninguna escena es menos tierna
que verte hablar de amor.

Ahora también te apetece el MALBA
Qué querés que te diga
no sé qué estarás pensando
pero es un museo pituco y
no un negro matungo
con dos metros de tamaño.

Tirada siempre en el sillón
te pusieron la correa
te sacaron a pasear
te mostraron las vidrieras
te obligaron a comprar
levantaste la pata en un árbol
hiciste rodeos en la alfombra
y al fin te volviste a echar.

4 comentarios:

Mostra dijo...

Qué te puedo decir?
Hay veces que uno espera que el otro reaccione como uno quisiera que reaccione, más después se da cuenta que no sirve de nada esto.
Esperar..

Juan Depresion dijo...
Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
Santi Silva dijo...

Lau, lo peor es saber de antemano que NADA de esto sirve y seguir dándose la cabeza contra la pared.
Después de todo, la vida sigue siendo una especie de Libro Guinness en el que siempre intentamos alcanzar el máximo nivel de chichones.

PD:me intriga mucho el mensaje borrado.

Mostra dijo...

Sí..
Yo ya tengo el cráneo deforme me parece.